Vasos para contener a Dios
¿Se da cuenta de que usted, como ser humano, es un vaso? Un vaso es semejante a una botella
o a una taza. Hoy, mientras yo estaba con el Señor, me regocijaba por ser un vaso. Me dije a mí mismo: “Hombre, eres
exactamente igual a una botella. Tu boca se parece a la boca de una botella. El propósito de la botella es contener algo, no
a sí misma. Eres un vaso diseñado para contener a Dios”.
Éste no es mi concepto. Esto fue presentado inicialmente en Génesis y recalcado por Pablo en Romanos 9, donde afirma:
“¿Quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿No te das cuenta de que eres barro? El alfarero tiene autoridad soberana
para moldear el barro y hacer vasos”. Romanos 9:21 y 23 revela que Dios creó al hombre como un vaso. Somos vasos para
contener a Dios como vida. (Estudio-vida de Génesis, págs. 127-128)